Estación Quilmes: 01/01/2016 - 02/01/2016

  Hans Magnus Enzensberger

26 de enero de 2016




Declaración de pérdidas

Perder el pelo, perder la calma,
¿me explico?, perder el tiempo,
librar una batalla perdida,
perder peso y esplendor, perdón, no importa,
perder puntos, déjame terminar de una vez,
perder la sangre, perder al padre y a la madre,
perder el corazón, hace tiempo perdido
en Heidelberg, y ahora otra vez,
sin parpadear, el encanto de la
novedad, olvídalo, perder los
derechos civiles, me doy cuenta,
perder la cabeza, por favor,
si no puede evitarse,
perder el Paraíso Perdido, y qué más,
el empleo, al Hijo Pródigo,
perder la cara, que le vaya bien,
dos Guerras Mundiales, una muela,
tres kilos de sobrepeso,
perder, perder, y volver a perder, hasta
las ilusiones perdidas hace tanto tiempo,
y qué, no desperdiciemos una palabra más
en la tarea perdida del amor, digo que no,
perder de vista la vista perdida,
la virginidad, qué lástima, las llaves,
qué lástima, perderse en la multitud,
perderse en las ideas, déjame terminar,
perder la mente, el último céntimo,
no importa, termino en un momento,
las causas perdidas, toda sensación de bochorno,
todo, golpe a golpe,
¡ay!, hasta el hilo del relato,
el carnet de conducir, las ganas.



Hans Magnus Enzensberger
Alemania – 1929



De: “El hundimiento del Titanic” - Ed. Anagrama - 2002. Trad. Heberto Padilla

Obra: Desnudo Azul de Pablo Picasso (España - 1881 – 1973)


  Héctor Viel Temperley

22 de enero de 2016




Unas macetas de amarillo


No tengo para ver sólo los ojos.
Para ver tengo al lado como un ángel
que me dice, despacio, esto o lo otro,
aquí o allí, encima o más abajo.
Siempre soy el que ve lo que ya ha visto,
lo que ha tocado ya, lo que conoce,
no me puedo morir porque ya tengo
la muerte atrás, vestida como novia.
Voy entrando, de a poco, en lo que es mío,
en lo que ya lo fue, en lo que me nombra,
campos azules y altos hasta el pecho,
con el machete centelleante y rápido.
Veo cómo comienzan las naranjas
a nadar por el aire, a perfumarlo,
girando velozmente en sus semillas.
Veo moverse ese árbol, luego el otro,
pierdo el sentido de mirar la vida,
me lleva el mar, el pecho hacia lo alto,
muevo el cielo en el puño como un poncho.
Me quieren despertar y estoy despierto,
no me pueden tocar, me aman, me gritan,
me lloran como a muerto y estoy libre.
Yo puedo separar filo y cuchillo,
guardar el uno y arrojar el otro,
terminar con un truco la semana,
pintar unas macetas de amarillo.
Yo tengo como un ángel que me dice
aquí o allí, más cerca todavía,
habla, calla, resiste, estira el brazo,
toca despacio todo lo que es tuyo.




Héctor Viel Temperley
Argentino (1933 – 1987)




Publicó: “Poemas con caballos” (1956); “El nadador” (1967); “Humana vitae mía” (1969); “Plaza Batallón 40” (1971); “Febrero 72 – Febrero 73” (1973); “Carta de marear” (1976); “Legión extranjera” (1978); “Crawl” (1982) y “Hospital Británico” (1986).


Manal

15 de enero de 2016







Jugo de tomate


La tierra que te da la vida,
da un tiempo para decidir;
eligiendo inteligentemente,
todo el mundo podrá ser feliz
Jugo de tomate frío,
jugo de tomate frío
en las venas,
en las venas deberás tener.

Si querés ser un terrible vago,
todo el día panza arriba y a dormir;
o elegiste ser un tipo capo,
siempre serio y que da temor.

Si querés triunfar con las mujeres,
tener muchas que lloren por vos,
tendrás que ser muy poco inteligente,
tener dinero y buena voz.

Si querés ser un hombre importante,
que se hable todo el día de vos,
o querés inmortalizarte como héroe,
asesino o semi-dios.

Deberás tener: jugo de tomate frío,
jugo de tomate frío
en las venas,
en las venas deberás tener.


Manal

Fue un trío precursor del blues y el rock cantados en castellano. Integrado por Alejandro Medina (bajo, voz y teclados), Claudio Gabis (guitarra, armónica, piano y órgano) y Javier Martínez (batería y voz).

  Shirley Villalba

8 de enero de 2016




SABIDURÍA DE LOS GRISES


Y miras la distancia con el azul de la nostalgia
y sigues muriendo un poco cada día
y miras las cenizas con el gris de la llegada
y empiezas a morirte más que ayer
y miras tus cabellos y tu cuerpo transformados
y con la sabiduría de los grises
descubres con enfado
lo que has perdido sin saber




AGUACERO DE LUNA


Cuando sus manos
mojan mi sombra
la humedad me traspasa
y escribe en mi sangre
un camino de luz
que se hace noche en mis venas
y me bautizo por fuera
y me baño por dentro
y me aguacero de luna



Shirley Villalba
De "Poesía Latinoamericana Hoy" - 20 países, 50 poetas

Nació en Coronel Oviedo, Paraguay en 1974. Publicó "PENUMBRA HEMBRA"

Fotografía: http://www.artepoetica.net/Shirley_Villalba.htm

  Damián Jerónimo Andreñuk

4 de enero de 2016




Desde un espacio ínfimo


Identifico en ella lo que se ha ido de mí;
cómo respeta el amor del corazón,
cómo cambia de búsquedas tiznada de nubes,
cómo sangra feliz eludiendo abismarse.

No se arrastra ni se escapa
ni le implica un esfuerzo su autenticidad;
discretamente aporta sus alas,
reconstruye la historia desde un espacio ínfimo
y consigue una versión mucho más pura.  



Poema del desasosiego


Yo que fui un adusto niño
rezagado por el miedo,
yo que albergo muy adentro
este declive sin fin que me acompaña
en mi estática caída
aunque mi sangre rebulla a borbotones
atizada por mis muertos,
yo que he buscado en vano
las raíces de la vida
y una inmóvil victoria sobre el tiempo,
yo que soy esta gris mezcla de contradicciones
en una única sustancia,
que he sido encerrado en este cuerpo
con un íntimo enemigo desde mi nacimiento,
yo que he quedado a solas tantas veces
con el vértigo y con el azoramiento,
yo que seré hasta siempre
un puñadito de ceniza deslucida
en que cualquiera soplará mi obstinación,
mi vanidad y mis tormentos,
yo que no sé habitar mi nombre
y que he cargado largamente
con las piedras del apego y la carencia;
sé que nunca habrá respuestas para mis temblores
pero he erigido un sacro templo para los “no importa”.



Un jardín antiguamente amado


  Estás a salvo.
  Te nutre y te conduce
  la gran sabiduría
          de la sangre.

  Y cuando marches a través de todas tus edades
         como por un jardín antiguamente
                    amado,
     cuando concibas a la muerte
        y sus tinieblas insaciables,
     cuando el último brillo de tu boca
        se apague duramente
  serás aún
        la fugitiva niña despojada de máscaras
         que los atardeceres reconocen,
  serás el amarillo dulce
         que las hojas de otoño
                  desvanecen.

  Seguirás abriendo con tus manos
  bellísimos portales
                        en el aire.



Damián Jerónimo Andreñuk 



Nació en City Bell en 1986 y reside en Villa Elisa, ambas localidades ubicadas en el partido de La Plata, Bs. As. A través de certámenes, publicó tres libros: Omisiones (2010), Portales al vacío (2011) y Metástasis (2015). También obtuvo varias distinciones; entre ellas, el Primer Premio en el X Concurso Internacional de Poesía organizado por Ediciones Hespérides en 2012, que le valió la publicación de un cuadernillo: Formas concretas (2013). Y el Primer Premio en el V Concurso Internacional Literarte, que le valió la publicación de otro cuadernillo: Silencio de crisálidas (2015).


Fotografía brindada por el autor
Obra: Svetlana Kolosova  (Rusia)